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Perrito con TERAPIA HOMA

 

 

Perrito Canuto se sanó con la 
Terapia Homa

Observación:
Libertad Agurto Plata
Casa Blanca - Bernal
Teléfono 321805
L.E 02638815
En el mes de agosto del presente año (2000), Canuto, el pero engreído de la tía Chela en Casa Blanca tuvo otro percance con su salud, noté que dormía demasiado y se le veía desganado, no tenía apetito, no podía tragar y conservaba una mucosidad constante en la nariz. Además tenía fiebre muy alta, se notaba que le dolía todo el cuerpo o sufría de dolores internos, pensé que tenía alguna infección  porque gritaba sin razón aparente. Como no comía, se bajo de peso y comencé a darle leche ayudada de un algodón por gotas, ceniza de Agnihotra con agua con Ghee, hacía una crema dura con algo de consistencia y se la hacía tragar, primero tres veces al día.
También la coloqué un Yantram a su cuello y lo tenía junto a mí en el Agnihotra de la mañana y de la tarde, lo mismo cuando hacía el fuego del Triambakam por varias horas en la cabaña que hay en la chacra. Así pasó dos semanas y llegó el tiempo en que lo vi muy grave, comenzó a convulsionar y a temblar. Fue cuando decidí llevarlo al veterinario de La Unión porque me angustiaba que la infección no cedía y en concreto no sabía que enfermedad padecía. Con sólo verlo el veterinario me describió los síntomas y me dijo que la enfermedad era DISTEMPER, que es un virus que produce una infección grave, propia de los perros y de la cual nunca se salvan. Me aconsejó que le aplicara una ampolla para eliminarlo y evitarle más dolores porque la enfermedad es progresiva y cada vez determinante.
Rechacé el consejo del veterinario y más bien le conté que había venido administrándole la medicina de la Terapia Homa y que seguiría haciéndolo para lograr su recuperación.
El veterinario me dijo que para esa enfermedad no hay medicina que cure y que si sucedía lo contrario, cosa que él no creía , pues yo misma lo visitaría junto con el perro para probarle el poder del a ceniza de Agnihotra de la Terapia Homa. De regreso a casa me aferré más a todo lo de la Terapia Homa, coloqué con una faja un Yantram en el ombligo de Canuto, administrándole varias veces al día la ceniza de Agnihotra con Ghee y teniéndolo presente constantemente en los fuegos de la mañana y de la tarde y en las horas de Triambakam. Lo mismo hice con el perro grande llamado Adonay que no tardó en hacer visible la enfermedad, pues también se había contagiado, aunque con menos gravedad, quizás porque era más fuerte.
Dos semanas después con ese tratamiento ambos superaron la enfermedad, Canuto se ve feliz, sano y con un pelaje bonito.